martes, 23 de marzo de 2010

Sinfónía de amor


Pasa el mundo a través de mis miradas

sin detenerse a escuchar, sin hablar

solo, recorriendo el infinito álamo de rosas

aplastadas, sucias, y sin fe

sin mujeres que le bailen, sin aplausos que lo vivan

los autos en las carreteras, y los momentos en un segundo

contenido, aquel del cual no hablas

y que va cayendo por el inicio de la cuidad

como si fuese la esperanza, de creer

¡Creo!...sin saber en que

alzas la vos, y gritas

las manos muertas sin pulgares

y las verdes veredas, de una lluvia sin sueños

de las ciudades al fondo, de una mentira.-


Y empiezas de nuevo,

¿Me ayudarás a empezar también?

¿Me llevarás?

¿No lo harás?

no tienes respuesta, porque así somos

sin mundo, para una respuesta

sin problemas de nadie, sin importarnos los demás

extendemos la mano, sin saber a quien levantamos

y alzamos, y lo hacemos hombre

y le enseñamos, sin amor, sin mundo

solo llevando el tiempo através de una canción

en el espacio, en las horas

en los gritos, en los golpes

sin hablar, nos miramos, y creemos que nos amamos

sin sentir nada por el otro

te abrazo, sin quererte, porque así somos

y te miro, y te llamo, y te digo que si, que te quiero

y me crees, y yo te creo, cuando sabemos que todo es una mentira

pero así somos, gastamos tiempo diciendo que nos queremos

cuando ni siquiera queremos vernos,

pero, nena, nos amamos.


Y puedes llamarme, y hablarme de madrugada, y decirme que me quieres.


Porque, si, te voy a escuchar, aunque no te quiera.