
Sin suelo en donde podamos caer ni mundo en donde poder estar
sin pan, ni alma, sin ventas, ni comidas rápidas
sin título, ni mente con la que puedas pensar
sin un tiempo en donde te puedas arrimar
sin el viento para vomitar, ni las luces felices para festejar
sin los pechos enormes, ni las ropas apretadas
sin baño, ni papel, sin cadena, ni agua
sin cara, para llegar a dormir
sin dignidad de la que nos podamos reír
sin las lágrimas, sin los besos
sin las risas estúpidas,
ni las corridas rápidas en los túneles
sin conocimiento de lo que te espera mañana
sin sopa, ni bananas, ni siquiera unas pastillas
sin nada...
Solo con...hipos taquicárdicos, aliento de infierno
cantando canciones hippies con tonada sexista y racista
viviendo epicuraneamente, sin límites,
y con mañanas eternas, sin sol que nos guarde,
y sin casa a donde llegar, solo, con la ropa desgastada
solo, con dos que tres mujeres
solo, con el infierno y los demonios
solo, cantando bajito
y gritando y pateando, a las 6 de la mañana
solo con un alma que te guarde, con risas, con llantos
con irlandeses bailando; y amando
los espasmos port morten que sobre la pista mojada estás teniendo
y teniendo y teniendo y teniendo y teniendo
bailando tu alma con el alma de un perro
hasta que ya estás muerto.