
Saber el sentido de la eternidad
querer comprender tu aliento en mi rostro
hablarte de mi, no es casualidad
sentirte cerca, enredado en tus brazos
es amarte lo suficiente como para olvidar
Escribirte en mil pedazos de colores
descubrirte mojada en la cama sinfónica
es también seducirte desnuda
y aplicarme sobre ti, sobre tu mundo
Abrazar el tiempo en una habitación
mirarte sedienta, me escuchas pero sonríes
te conviertes en ángel sobre lunas
vuelas en el foco que constante cae
sobre las sábanas, su luz.
Me veías cantando, me veías rezando
me veías dentro de mi mundo
me veías en las lunas mirando
pero ahora me ves bajo tus encantos
me ves rendido a tu belleza
me ves dormido
me ves cada ves más lejos
cada ves más dormido
cada ves más profundamente tranquilo
y sabes lo que ves, por eso te quedas
por eso abundan en la habitación
y en el foco que cae sobre las sábanas
el aliento comprendido de tu cuerpo
el que hasta ayer no lo entendía.